Hinchas presos

El martes, tras el cotejo que clasificó al “Ciclón” a los cuartos de final de la Copa Sudamericana, barra bravas del equipo santafecino destrozaron el sector visitante del estadio “La Olla” y arrasaron con todo lo que encontraron a su paso en las inmediaciones. Al menos 38 de los 500 fanáticos que cruzaron la frontera, aún, no pudieron retornar a su patria.

Los hinchas se negaron a declarar el miércoles ante el fiscal de la causa, Cristhian Bernal, quien imputó a los sabaleros por vandalismo y por infringir las leyes de “la no violencia en las canchas” y de “la prohibición del consumo de bebidas alcohólicas”.

Además, el funcionario solicitó al juez de la causa la prisión preventiva, por considerar que los acusados, al no tener residencia en Paraguay, podrían darse a la fuga, ya que deberían afrontar el proceso en donde sucedieron los hechos.

Este jueves, en pequeños grupos y a las 12 (hora GMT), los vándalos tendrán que comparecer ante el magistrado. En ese mismo horario, los siete afectados que presentaron denuncias por los destrozos que los perjudicaron se presentarán ante el fiscal para informar el daño económico que sufrieron.

A los infractores, por otro lado, se les secuestraron decenas de armas blancas, bebidas alcohólicas y dosis de marihuana. Según reportó el periódico local ABC, en el caso de que no compensen los daños, materiales y sociales, los imputados podrían afrontar un juicio oral y público.

En cuanto a las pérdidas económicas, la dirigencia del club Colón de Santa fe se hará responsable de los gastos provocados por su parcialidad.

Todo comenzó cuando en el minuto 70 del cotejo por la Copa Sudamericana, los locales pasaron al frente en el marcador, por 2 a 1. Los hinchas rojinegros agredieron a los plateistas locales y, por medio de una fuerte represión, la policía desalojó la tribuna visitante.